PREVENCIÓN DE LA DISENTERÍA


La disentería es una de las enfermedades gastrointestinales que suelen presentarse con mayor frecuencia, produciendo síntomas molestos en aquel que la padece, tales como calambres, diarreas, dolor abdominal, vómitos, entre otros. Por fortuna, existe una manera de evitar contraer esta enfermedad, para así asegurar una buena salud, y a continuación hablaremos acerca de las medidas de prevención de la disentería que pueden ser aplicadas para hacer frente al problema incluso antes de que se manifieste.

Medidas de prevención de la disentería

En vista de que la disentería comprende una enfermedad bacteriana, ocasionada por una ameba o por la bacteria Shigella, cuyo contagio se produce por medio del consumo de agua o alimentos contaminados, resulta pertinente adoptar ciertas medidas para la prevención de esta patología, tales como prestar una mayor atención a la higiene de agua, especialmente en aquellos países en los que existen dudas acerca de la seguridad del vital líquido, prefiriendo beber sólo agua embotellada para disminuir el riesgo de contraer la infección.

También, pueden emplearse ciertos antibióticos para la prevención de la disentería, cuya administración deberá ser especialmente recomendada por un médico o proveedor de la salud.

Otras recomendaciones para la prevención de la disentería

Además de lo antes expuesto, existen recomendaciones adicionales que han de tomarse en consideración para reducir aún más el riesgo de infección. Así, más allá del uso de antibióticos e incluso de la hospitalización, se aconseja tomar las siguientes medidas para la prevención de la disentería:

  • En caso de presentar diarrea o vómitos, tomar abundante agua para prevenir el estado de deshidratación y descansar lo suficiente.
  • Mantener buenos hábitos de higiene para evitar que se propague la infección a aquellos con los que se mantiene contacto, esto incluye lavarse bien las manos con agua y jabón después de ir al baño, así como evitar baños compartidos y otros objetos de uso común, hasta tanto el problema no haya sido resuelto.
  • Reanudar las actividades laborales o escolares sólo cuando desaparezca alguno de los signos o síntomas de la disentería, dentro de un límite de 48 horas.

Para más información, no dude en consultar con su médico de confianza y mantenerse al tanto acerca de cómo prevenir la disentería.