SÍNTOMAS DE LA DISENTERÍA


La disentería corresponde a uno de los trastornos gastrointestinales más comunes que suelen presentarse, trayendo consigo manifestaciones molestas que pueden causar dolor, incomodidad y gran preocupación, y que suelen confundirse con las de otras patologías. Por ello, a continuación hablaremos acerca de cuáles son los síntomas de la disentería y qué podemos hacer para contrarrestarlos.

Síntomas de la disentería 

Como bien mencionábamos, la disentería es un trastorno que afecta a los intestinos, provocando su inflamación especialmente a nivel del colon. Normalmente, se produce por una infección o infestación parasitaria, aunque también puede ser producto de alguna infección por virus o algún irritante químico.

A modo general, los síntomas de la disentería son los siguientes:

  • Dolor en la zona abdominal.
  • Calambres.
  • Cefalea.
  • Tenesmo, también entendido como dificultad para defecar.
  • Diarreas acuosas.
  • Heces con presencia de sangre y moco.
  • Vómitos.

Cómo tratar los síntomas de la disentería

Afortunadamente, los síntomas de la disentería pueden ser tratados y, la gran parte del tiempo, los mismos desaparecen por sí solos, tras el paso del tiempo.

En la mayoría de los casos, los expertos de la salud recomiendan beber abundante líquido para prevenir la deshidratación, producto de la diarrea y de los vómitos severos.

Además, en vista de que las sales y los minerales también se ven disminuidos, a veces resulta necesaria la hospitalización del paciente y, en los casos más graves, se precisa de la administración de medicamentos antibióticos.

Cuando se determina que un parásito ha sido el causante de la inflamación intestinal, suelen emplearse medicamentos amebicidas como tratamiento, los cuales tienen como fin último acabar con el parásito.

Por otra parte, existen remedios caseros que pueden ser aplicables para contrarrestar los síntomas de la disentería, tales como la ingesta de zumo de limón, granada, yogur y jugo de jengibre, entre otros.

Sin embargo, esta afección debe ser mejor tratada bajo completa vigilancia médica, para así controlar la reposición de líquidos y mantener al paciente a salvo ante cualquier eventualidad.

Por tal motivo, consultar con un especialista es siempre una prioridad, a fin de obtener el diagnóstico y el tratamiento más adecuado para eliminar por completo los síntomas de la disentería.